Escrito por Lázaro Freire
Traducción de Teresa – teresa_0001@hotmail.com
¿Quién conoce esta historia que viene a continuación???
Había un tipo que, dicen, habría nacido de una virgen. Nacido de descendientes de los reyes legítimos, en un período en que su país se encontraba en manos de usurpadores, ni un poco ligados a las tradiciones religiosas o al bien del pueblo.
El nombre por el cual pasó a ser conocido en Occidente, aunque en realidad expresado en otro idioma, recuerda el concepto griego de Christhos, o los radicales presentes en el “Espíritu Crístico”.
Varias profecías indicaban que este niño podría llegar a ser el Rey, aunque a algunos les pareciese que eso sería en sentido religioso, y a otros, en sentido político.
La gente esperaba un salvador. Éste sería una encarnación del segundo aspecto de Dios, que es uno solo, pero se divide en tres.
El rey usurpador, de familia ilegítima, mandó MATAR a todos los primogénitos, forzando a los padres del salvador a que huyesen con él.
Fue criado de forma aparentemente humilde, pero daba muestras de su sabiduría. Dejaba escapar también trazos de erudición que indicaban educación primorosa (tal vez patrocinada por los que apoyaban a la familia real que intenta volver al trono).
Tras una infancia poco documentada, dio algunas muestras de su poder durante la adolescencia.
Algún tiempo más tarde, en edad adulta joven, se reveló como presencia divina. Su presencia coincide con una época de grandes conflictos. Durante esta fase de ocupación de sus tierras y tentativas de revolución, se empeña en dejar claro que tenemos que poner aparte lo que es de Dios, haciendo notar que lo transitorio no es de ese mundo.
Rompe paradigmas, enseña una moral extraña, se empeña en que cada cual cumpla con su papel. Enseña, literalmente, que ÉL es el CAMINO hasta el Padre. Que es necesario hacer los trabajos, pero que podemos ofrecer a Él, unirnos a él, que es Camino, que es Verdad. No porque él sea egoico, sino porque está ligado al Creador. Y es difícil para nosotros conectar con lo intangible, pero es posible ligarnos a un salvador conocido. Como él está ligado a Dios, ligándonos a él, hacemos “auto-stop”…
Termina por morir aún joven, de forma trágica, poco después de su revelación como Presencia Divina.
No escribe nada, pero algunos registran partes de su vida, especialmente las cercanas a la muerte, en las que vierte toda su sabiduría. Los fragmentos registrados son pequeños, pero capaces de cambiar nuestra noción religiosa de causa y consecuencia, aportando nueva luz acerca de la naturaleza del espíritu, y la supervivencia de éste al cuerpo.
Los pocos capítulos sobre su vida en presencia divina quedan insertos como parte de las escrituras sagradas, y están traducidos a prácticamente todas las lenguas del mundo. El libro con la vida del Dios Vivo es más popular y más citado, por sí mismo, que la propia obra religiosa mayor que lo contiene.
Antes de morir deja claro que ha de volver, en el futuro. Hacen religión en su nombre, pero él mismo nunca fue adepto de esos preceptos religiosos, incluso porque nunca fundó religión alguna, nunca fue moralista, nunca fue amigo de cambiar sabiduría por rituales, y no podía haber frecuentado lo que sólo se hizo después de él.
¿Conocéis esta historia? No sois los únicos. Los que han creado el mito ecuménico de “Jesucristo”, juntando elementos del Mitraísmo, judaísmo, paganismo, culto al sol y filosofía moralista griega también lo conocían. Porque esta es la historia de Krishna, que vivió en 3.000 a.C., en la India.
Fonte: STUM World
